El ajetreado estilo de vida que llevamos en la actualidad puede hacer que comer en familia sea un verdadero reto. Y lo cierto es que esta práctica ofrece diversos beneficios nutricionales, sociales y psicológicos para quienes se preocupan de fomentar este recomendable hábito. En este artículo te explicamos los beneficios de fomentar el tiempo en familia sobre la mesa, junto con una serie de recomendaciones para adquirir este hábito en el seno del grupo familiar.

COMER EN FAMILIA Y SUS BENEFICIOS

Los beneficios de comer en familia, ya sea compartiendo el desayuno, el almuerzo o bien la cena, tienen numerosos efectos positivos. Aún así y como refleja la universidad de Harvard en una de sus publicaciones sobre este hábito, apenas un 30% de las familias tienen esta costumbre bien arraigada.

Y no se trata de beneficios menores. Al contrario, las repercusiones de incentivar las comidas en familia resultan de lo más interesantes para multitud de madres y padres preocupados por un mejor desarrollo de sus hijos en las primeras etapas de su vida.

Por ejemplo, un equipo de pediatría canadiense realizó en 2015 un repaso de más de 1.700 artículos sobre el impacto de las comidas en familia sobre los más jóvenes. Su conclusión fue que existe una relación positiva entre las comidas familiares frecuentes y el aumento de la autoestima y el éxito escolar en los adolescentes

De hecho, este análisis demostró que el hábito de comer en familia es un reductor de riesgos tan preocupantes en los más jóvenes como los desórdenes alimenticios, la propensión a la ingesta de alcohol o de comportamientos depresivos. 

De forma general, instaurar el hábito de comer en familia en casa puede conllevar otros tantos efectos secundarios de lo más deseables:

  • Mejorar la relación con los hijos

Cuando lo hacemos con frecuencia y de forma ya instaurada en el hogar, comer en familia ayudará a fortalecer la relación con los más pequeños. Es, además, la oportunidad perfecta para que todos en la familia se interesen un poco más por el resto de miembros.

  • Permite aprender habilidades sociales

Comer juntos en familia les da a los niños la oportunidad de aprender y practicar sus habilidades sociales, formas de comportamiento y destrezas de conversación que les serán de provecho en su vida adulta.

  • Probar nuevos alimentos

En un clima agradable de comida en familia resultará más fácil que los pequeños se animen a probar nuevos sabores, alimentos, texturas, etc. Algo esencial para una alimentación saludable y equilibrada.

  • Involucrarles en la preparación de las comidas

Cuando el tiempo de comida en familia ya es un hecho cotidiano, puede ser buen momento para hacer que los niños puedan participar en la preparación de las comidas. No solo se sentirán más valorados, sino también apreciados como la parte importante de la familia que son.

Ahora bien, ¿qué pautas podemos seguir para instaurar el hábito de comer en familia y ver materializados sus beneficios? 

  1. Hacer que las comidas en familia sean una prioridad en casa. 
  2. Instaurar el hábito poco a poco, aumentando el número de comidas en familia de forma progresiva.
  3. Dejar que los niños participen, ya sea ayudando a preparar la comida o a poner la mesa. 
  4. Dejar que éstos tomen la iniciativa en la conversación.

COMER EN FAMILIA YA TIENE SU PROPIO PROYECTO

Si quieres pasar más tiempo en familia y te parece buena idea aprovechar las comidas del día para estrechar los lazos familiares, tal vez te interese saber que ya existe un proyecto dedicado exclusivamente a promover este hábito. 

Se trata del Family Dinner Project, una iniciativa norteamericana cuyo objetivo es ayudar a las familias a encontrar nuevas formas para hacer que las comidas sean más enriquecedoras (al tiempo que divertidas) en familia.