¿Es productiva nuestra jornada laboral? ¿Lo es nuestro tiempo de calidad con los hijos? A menudo, en nuestras rutinas, se cuelan los temidos ladrones de tiempo. Puede que los tengas identificados y sepas cómo evitarlos… o puede que no. Vamos a identificarlos para poder establecer pautas que los eliminen y nos hagan ser más eficaces en la gestión de nuestro tiempo.
Estos son los principales ladrones de tiempo
Se llaman ladrones de tiempo a todos aquellos hábitos y actividades que nos distraen o desconcentran de lo que tenemos que hacer. Puede (y suele) ser el trabajo, pero no solamente. A veces afecta a nuestro ocio o al tiempo que pasamos con la familia y los amigos. Contra lo que se pueda pensar, hay muchos ladrones de tiempo que no son los que tendemos a imaginar. Vamos a verlos:
- Internet. Internet en general, y las redes sociales en particular, son los ladrones de tiempo por excelencia. Cualquier notificación que nos llega al móvil a través de WhatsApp, Twitter, correo electrónico, etc, nos interrumpe constantemente y nos desconecta de nuestra tarea principal. Esto también aplica al tiempo de ocio. Estar con amigos o familia y no dejar de mirar el móvil te distrae de lo importante.
- Hacer varias cosas a la vez. Si tenemos, por así decirlo, dos o más frentes abiertos, no podremos focalizar la atención en ninguno de ellos.
- Posponer tareas. La procrastinación es un ladrón de tiempo de los más peligroso.
- No saber delegar. A veces creemos, erróneamente, que terminaremos antes un trabajo si lo hacemos nosotros que si lo hace la persona a la que iba dirigido. El problema: empleamos parte de nuestro tiempo y no atendemos a lo importante.
- Falta de planificación.
Además de estos, están los ladrones de tiempo ajenos a nuestra voluntad:
- Reuniones. ¿Cuántas veces has lamentado que te pongan una reunión cuando te habías concentrado al máximo para terminar algo?
- Interrupciones de otros compañeros y/o clientes a través del correo, el teléfono, etcétera.
- Imprevistos: asuntos urgentes, incidencias con familiares o en el trabajo…
Cinco hábitos para reducir al máximo los ladrones de tiempo
Quizá sea imposible eliminar al 100% los ladrones de tiempo, pero sí podemos reducirlos al máximo. Toma nota de estos consejos:
- Planifica tu semana. Márcate objetivos razonables usando algún gestor de tiempo, como por ejemplo Google Calendar.
- Acostúmbrate a apartar el móvil cuando realices tareas que exijan la máxima concentración. Durante una o dos horas, la mayoría de las cosas pueden esperar. Siléncialo, ponlo boca abajo para no ver la pantalla y comprométete a terminar lo que habías empezado.
- Aprende a decir que no y a delegar. Si alguien viene con un pequeño asuntillo que «seguro que resolverás en cinco minutos», niégate amablemente u ofrécete a hacerlo cuando tus prioridades estén terminadas. De la misma manera, debes aprender a delegar esas tareas que puede hacer otra persona y te apartan de lo importante.
- Si teletrabajas, busca la manera de que las tareas domésticas no inunden la jornada laboral. Esos «ya que voy a la cocina, pongo una lavadora» son ladrones de tiempo muy habituales cuando se trabaja en casa.
- Utiliza el móvil… para bien. Hay numerosas aplicaciones que te servirán para organizarte.