Cuidarse y hacer ejercicio es ahora incluso más necesario que nunca. De hecho, el ejercicio frecuente -junto a otros buenos hábitos- es una de las recomendaciones generales para luchar contra los efectos del coronavirus. Ya hay numerosos estudios como el publicado por el portal científico Frontiers donde se evidencia el importante papel de una vida activa como prevención ante el virus.
Pero antes de continuar, ¿qué es exactamente una bicicleta elíptica? ¿En qué se diferencia de una bicicleta estática convencional o de otras formas de ejercicio? Y ¿cuáles son sus beneficios?
En primer lugar, debemos matizar que el ejercicio sobre la bicicleta elíptica lo realizamos de pie, en lugar de hacerlo sentados (como en la bicicleta estática).
Estructuralmente también hay una gran diferencia entre ambas máquinas: mientras los manillares de la bicicleta estática son fijos, los manillares en la bicicleta elíptica son móviles, contribuyendo a generar la fuerza con los brazos junto con el pedaleo.
BENEFICIOS DE LA BICICLETA ELÍPTICA QUE DEBES CONOCER
Como avanzábamos unas líneas atrás, la bicicleta elíptica cuenta con una estructura tal que permite al usuario ejercer la fuerza de movimiento tanto con el tren inferior -de pie sobre los dos pedales- como con el tren superior, a través del agarre de sus correspondientes brazos móviles.
Estos dos rasgos tan característicos de la bicicleta elíptica le conceden una serie de beneficios importantes para quienes quieren ponerse en forma:
MENOS IMPACTO PARA LAS EXTREMIDADES
Este beneficio de la bicicleta elíptica se entiende si la comparamos con otros métodos de ejercicio cardiovascular tales como salir a correr o hacerlo sobre una cinta en un gimnasio. Dado que, en la bicicleta elíptica, las plantas de los pies no se separan en ningún momento de los pedales -que marcan la rotación-, el impacto en las articulaciones es mínimo.
Así lo afirman diversos estudios, donde la bicicleta elíptica ha demostrado ser una muy buena opción para procesos de rehabilitación.
ES PERFECTA PARA FORTALECER LAS PIERNAS
La bicicleta elíptica ofrece varias opciones para regular el esfuerzo que va a suponer para la musculatura del tren inferior. La primera de ellas es el propio regulador de resistencia con el que cuenta cualquier bicicleta elíptica que se precie: a mayor resistencia, mayor tendrá que ser la fuerza que ejerzamos con las piernas para mover los pedales.
Pero aparte del citado regulador de resistencia, la bicicleta elíptica se presta a otra forma de elevar la intensidad del ejercicio: pedaleando con las piernas en una posición de semiflexión (como si quisiéramos pedalear al tiempo que nos agachamos). Cuanto mayor sea la flexión de nuestras piernas, más nos costará mantener el ritmo.
Sea cual sea la forma de darle un extra de esfuerzo al pedaleo, hay varios estudios que han demostrado sus importantes beneficios. Por ejemplo, el de una mayor activación del cuádriceps y músculos femorales en la bicicleta elíptica respecto de otros medios como la cinta de correr.
¿Y QUÉ HAY DEL TREN SUPERIOR? ¡TRABAJO FULL-BODY!
Pero la bicicleta elíptica no solo es particularmente beneficiosa para el fortalecimiento de las piernas. Por otro lado, la región abdominal también se llevará su parte del trabajo de estabilización para un pedaleo efectivo, lo que demuestra que la bicicleta elíptica tiene también beneficios abdominales.
Aparte, los agarres superiores son de la máquina elíptica permiten ejercer suficiente fuerza con los brazos como para ponerlos a pleno funcionamiento. De esta forma, una sesión de entrenamiento a lomos de una bicicleta elíptica te va a permitir trabajar a nivel de cuerpo entero, en lugar de trabajar solamente a nivel de partes aisladas.
Ahora solo falta programar un plan de ejercicio completo en la bicicleta elíptica y combinarlo con una alimentación saludable para recibir todos sus beneficios.
