Nadie duda de la importancia del estómago como un órgano clave. Una pieza esencial en nuestro cuerpo que puede sufrir todo tipo de patologías y enfermedades; desde más leves tipo gastritis a otras más graves como tumores o úlceras sangrantes que pueden poner en riesgo la vida del paciente. Precisamente, la zona donde se localiza el estómago es lo que se conoce como boca del estómago y en ocasiones una persona puede tener un dolor en esta misma zona. De sus posibles causas y tratamientos hablaremos a continuación.
¿Qué es el dolor en la boca del estómago?
Como hemos dicho anteriormente, este espacio que ocupa el estómago se conoce popularmente boca de estómago (en medicina se refieren a ella como epigastrio) y es precisamente ahí donde un paciente puede tener un dolor debido a ciertos tipos de patologías abdominales. Síntomas que pueden ser por dolencias más leves y frecuentes como puede ser un dolor relacionado con la ingesta de comida, pesadez, náuseas… Esto es, el dolor en la mayoría de las ocasiones no guarda relación con algo más grave que implique una afectación orgánica.
Posibles causas del dolor en la boca del estómago
Salvo consecuencias más graves e importantes, con frecuencia ese dolor es uno de los síntomas asociados a los problemas gástricos más comunes. Una molestia que se suele intensificar en función de dónde se localice, si se irradia a otras zonas adyacentes, si se da en ciertos momentos del día o bien cuando se ha comido algo. En líneas generales, el dolor en la boca del estómago se suele deber a:
- Gastritis
- Estreñimiento
- Reflujo gastroesofágico
- Úlcera péptica
También puede aparecer dolor en caso de patologías asociadas a un ritmo de vida y a unos hábitos poco saludables donde el estrés, una dieta poco adecuada y el consumo de alcohol o tabaco están detrás. En los casos más graves, los dolores en el boca del estómago responden a:
- Pancreatitis
- Infarto
- Problemas en la vesícula biliar
Una gastritis, un dolor por reflujo o una úlcera será la respuesta que más se repetirá en la consulta médica cuando una persona acude con un problema relacionado con un dolor que siente en la zona conocida como boca del estómago. En el caso de la primera de ellas se produce cuando hay una inflamación del revestimiento de este órgano provocado por ciertos medicamentos, consumo excesivo de alcohol o infección en el estómago causada por una bacteria. Esto lleva a un dolor acompañado de náuseas e inapetencia.
Síntomas que también aparecen cuando una persona padece reflujo gastroesofágico; esto es, cuando el tubo por donde van los alimentos de la boca al estómago está irritado y viene acompañado de acidez y dolor como es el caso. Si lo que padece esta persona es una úlcera péptida, la mucosa que recubre el estómago o el duodeno se ve alterado por la misma.
De igual manera, el estilo de vida influye muchas veces en la buena salud de la boca del estómago. Así, muchas veces el dolor responde a una situación o una época de estrés o ansiedad que se manifiesta de esta manera. Lo mismo que si no se siguen unas pautas saludables a la hora de comer (con abundancia de fritos y procesados ) o se abusa del tabaco y del alcohol ya que impactan negativamente en el tracto digestivo.
Trastornos graves que pueden manifestarse con dolor en la boca del estómago
En el menor de los casos, el dolor en la boca del estómago tiene tras de sí un problema que va más allá de una simple irritación o una dieta poco saludable. En ocasiones, todo responde a la aparición de una enfermedad más grave como puede ser una pancreatitis, un infarto (uno de los síntomas es el dolor en la boca del estómago) o una mala salud en la vesícula biliar.
En la primera de ellas, junto al dolor en la boca del estómago, el paciente suele presentar fiebre, hinchazón abdominal, presión arterial baja y vómitos. Si el problema viene por la vesícula biliar la persona lo diferenciará ya que este dolor se manifiesta de manera continua, irradia hacia la zona dorsal derecha y se suele acompañar de orina oscura, náuseas, intolerancia oral y vómitos de color verdoso.
Diagnóstico del dolor en la boca del estómago
En cualquiera de los casos anteriores (incluso si se trata de una sintomatología leve pero esta no se pasa en cuestión de días) es esencial acudir a la consulta médica para que puedan hacer una exploración y un examen clínico pertinente para dar con el diagnóstico correcto de la patología que está provocando el dolor en la boca del estómago.
Aparte de una exploración física, el profesional sanitario preguntará al paciente por sus hábitos de vida (para conocer si estos son saludables), si últimamente ha estado expuesto a mayor estrés, si es consumidor habitual y recurrente de tabaco o alcohol o si tiene otros síntomas aparte del dolor que siente en la zona de la boca del estómago. Esto es lo que se conoce como anamnesis y no es más que el proceso de exploración clínica que se ejecuta mediante estas preguntas por parte del médico para sacar conclusiones respecto a la dolencia y ciertos factores físicos, familiares, ambientales o personales que le puedan estar afectando.
Como parte de esta exploración previa y para dar con el diagnóstico correcto, en la consulta médica se realizan también una serie de pruebas complementarias. Es el caso de un análisis de sangre (para saber cómo está la salud digestiva del paciente), una endoscopia abdominal alta (llamada gastroscopia para detectar enfermedades en el esófago, el estómago y el duodeno), además, si es preciso, una ecografía abdominal. Esta última permite observar cómo están los órganos abdominales o identificar enfermedades graves como algunos tipos de cáncer entre otras aplicaciones.
Tratamientos para el dolor en la boca del estómago
Una vez descartados problemas más graves, en las patologías más comunes que están asociadas al dolor en la boca del estómago se lleva a cabo una serie de tratamientos que, en unos días y salvo complicaciones, dan resultado. Así, para molestias provocadas por la acidez o el reflujo, el médico recetará medicación específica como antiácidos, inhibidores de la bomba de protones…; mientras que si todo se ha desencadenado por una infección provocada por una bacteria como es la Helicobacter pylori (la más común), esta poco a poco irá remitiendo (junto con el dolor) gracias a la administración de los antibióticos prescritos en cada caso por el profesional.
Cuando se trate de patologías más graves, en cada caso será el médico el que determine el tratamiento de estas enfermedades subyacentes como una úlcera o una pancreatitis. Por ejemplo, si se trata de esta última y esta es aguda el tratamiento incluirá líquidos intravenosos, antibióticos y analgésicos.
Antes de todo esto se pueden prevenir ciertos dolores en la boca del estómago de una manera sencilla, pero que requiere de una importante fuerza de voluntad. Aquella que lleva a cambiar por completo el estilo de vida y la dieta para adoptar una alimentación más adecuada, llevando una vida más sosegada y relajada sin estrés o dejando de lado el tabaco, además de moderando el consumo de alcohol. Si esta es tu idea, toma nota y apunta en tu lista de la compra: más alimentos con fibra, aquellos ricos en probióticos como el yogur, más proteínas vegetales y más antioxidantes como tienen los ingredientes de la dieta mediterránea. Por el contrario, vete despidiéndote de fritos y empanados, embutidos, alimentos demasiado grasos y cantidades ingentes de azúcar.
Incluso si lo prefieres, puedes echar mano de algunos remedios naturales que te ayudarán a calmar el dolor de una manera más terapéutica, como es recurriendo a infusiones con propiedades beneficiosas para la salud intestinal y digestiva o técnicas como la acupuntura. En cualquier caso, es bueno que antes de probarlas por tu cuenta consultes con un médico en relación al dolor en la boca del estómago que padeces.
Cuándo buscar atención médica urgente
Salvo que se trate de un dolor puntual y leve, en el resto de los casos (sobre todo si se dan signos de alarma como los que describimos a continuación), es esencial buscar cuanto antes atención médica de manera urgente. Y es que puede que el tiempo sea primordial para atajar un problema de salud a tiempo que tenga un dolor en la boca del estómago como síntoma (como por ejemplo, un infarto de miocardio).
De esta manera, siempre que se sienta un dolor intenso y muy persistente que no se calma en la boca del estómago; se produzcan vómitos con sangre o heces negras o se tenga una dificultad para respirar, sudoración o mareos… se debe ir sin demora a un centro hospitalario o a una consulta con el médico de cabecera.
La mayoría de los dolores de la boca del estómago no son graves y mejoran cuidando el estómago con reposo, hidratación, dieta blanda, medicamentos analgésicos y a veces con antiácidos o protectores de estómago. Sin embargo, esto no quita que aprendamos algo más acerca de esta molestia y ciertas situaciones más graves para prevenirlas.